Hoy en día es muy importante para las empresas, disponer de personas bien formadas y especializadas en su campo para poder ejercer con éxito. Debido a la situación económica de la última década existe mucha oferta y poca demanda en el mercado laboral y los requisitos para obtener un puesto laboral son cada vez más altos. Por ello es importante contar con el talento senior y el junior.

Algunas empresas optan por perfiles jóvenes, recién egresados de la universidad. Este tipo de perfil suele aportar a la empresa nuevos conocimientos y agilidad teórica. Además, al contratar estos perfiles, la empresa se puede beneficiar de subvenciones y bonificaciones.

Existen tipos de empresas, como las startups, que cuentan con gente joven y motivada. Buscan perfiles para aportar en su nueva etapa profesional y aplicar lo aprendido en la universidad u institutos.

Los perfiles junior y senior tienen diferencias en las empresas

Sin embargo, en una empresa formada principalmente por perfiles junior, también se pueden observar algunos obstáculos a los que las empresas deberán hacer frente. El principal inconveniente es el de la falta de experiencia, ya que, los conocimientos que se aprende en la universidad, son principalmente teóricos. Como consecuencia, estos perfiles tienen un menor conocimiento práctico que, como se puede intuir, se consigue solo a través de la experiencia laboral.

De esta manera, un perfil del talento senior que cuenta con varias décadas de experiencia, así como de una formación sólida en su campo constituiría la solución perfecta para reducir las desventajas de contratar a trabajadores juniors. Ambos perfiles, se complementan de forma óptima pues el trabajador más experimentado puede servir de guía y de tutor para el empleado que carezca de experiencia. Además, este rol es una posición clave en la empresa, ya que entre sus funciones se encuentra la creación un vínculo entre diferentes generaciones, que permite fusionar los conocimientos de todas ellas y conseguir una sinergia muy beneficiosa para la empresa.

“La experiencia del talento senior, sigue prestando servicios impagables en cualquier proceso de transformación”

Cuando hablamos de perfiles seniors, no nos referimos únicamente a aquellos que han estado muchos años en la misma empresa y desempeñando las mismas funciones, año tras año. Sino, que abrimos el abanico a personas que tienen mayor experiencia, en diferentes sectores y en diversos puestos, y de responsabilidad.

En los últimos años, se ha podido observar cómo el mercado laboral ha sufrido múltiples transformaciones, provocando un mayor dinamismo. Esto se traduce a que el mercado ya no es tan estable y sólido y se producen rápidos cambios de forma constante. Esto ha provocado que el promedio, de la duración en una empresa de un trabajador disminuya considerablemente, causando una mayor heterogeneidad.

Consecuentemente, las generaciones de trabajadores más experiencia se han visto afectadas, produciendo una menor adaptación al contexto actual. Es por ello que, la típica frase “esto hemos hecho así desde siempre” ya no es una justificación aceptable para las empresas. Obligando a los perfiles senior a adaptarse con mayor rapidez. Si estos lo asumen y lo incorporan a su dinámica de trabajo pueden convertirse en un activo muy valioso para la empresa pues les permitiría aplicar los conocimientos prácticos adquiridos con el paso de los años. Esta experiencia permitirá optimizar los procesos tanto de las empresas como de los equipos más jóvenes.

Cada vez existen más perfiles laborales que dependerán de las características de la empresa. El talento senior y junior

Es importante recordar, que no existe una única solución para combinar perfiles senior y junior, sino que dependerá, de las características y necesidades de la empresa.

Finalmente, otro aspecto que podemos destacar en relación con los beneficios de contratar a perfiles más jóvenes y más experimentados es el de optimizar la imagen corporativa de la empresa.  No obstante, sigue siendo vital el mantenimiento de los perfiles seniors para que orienten y transmitan su conocimiento, evitando así los aprendizajes acierto-error.

Una forma muy frecuente es el Freelance. Al contrario de lo que se cree, no se trata solo de una persona que trabaja como autónomo de forma independiente. Sino una persona especializada en su campo, con un amplio espectro de conocimientos y contactos.

“Los profesionales ‘senior’ están mejor preparados para las situaciones de crisis, entre otras cosas, porque han vivido diferentes escenarios laborales y experiencias”

Una tendencia que se ha incrementado en los últimos años, es que las personas mayor edad que se han jubilado, vuelvan a ejercer su profesión. Esto se puede deber a múltiples causas. Siendo una de ellas su requerimiento, por parte de la empresa para que asesoren los procedimientos y procesos que se están y se van a llevar a cabo. Sin embargo, esto no significa que tienen que volver 100% a la operatividad, pero aportan apoyo a nivel estratégico para los nuevos talentos. Así se genera sinergia entre ambos perfiles, aprovechando las habilidades para crear equipos de trabajos sólidos, bien formados y con un alto rendimiento.

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